¿Alguna vez te ha pasado que tomas una decisión en el trabajo y luego te arrepientes? A todos nos pasa. La buena noticia es que hay una manera simple y efectiva de mejorar la calidad de tus decisiones diarias. Se llama journaling o registro matutino.

¿Qué es el registro matutino?

Julia Cameron, autora del libro «El Camino del Artista» popularizó esta técnica. Se trata de escribir libremente a mano durante 3 páginas apenas te levantas, antes del café, el correo electrónico o cualquier otra distracción.

Para muchos de nosotros, el trabajo diario implica una avalancha constante de decisiones, desde las más cotidianas hasta las más cruciales. Si bien algunas se toman de forma automática, otras requieren reflexión y análisis.

Puede sonar extraño, pero te sorprenderás de lo beneficioso que resulta para la claridad mental y la toma de decisiones asertiva.

¿Cómo te ayuda a tomar mejores decisiones?

Diversos estudios sugieren que tomamos alrededor de 33.000 a 35.000 decisiones diarias. Muchas son automáticas basadas en información almacenada en nuestro subconsciente sobre lo «bueno» o «malo».

Según el profesor Gerald Zaltman de Harvard Business School, el 95% de nuestra cognición ocurre a nivel subconsciente. Esto es necesario, ya que nuestro cerebro se sobrecargaría si tuviera que analizar conscientemente cada decisión.

Sin embargo, las decisiones laborales importantes, como el desempeño, la gestión del tiempo o la inversión en proyectos, no pueden dejarse al piloto automático. Escribir por las mañanas interrumpe este modo y nos invita a vivir la vida con mayor intención.

Beneficios del diario matutino para la toma de decisiones:

• Aumenta tu claridad mental: Al escribir sin filtro, organizas tus pensamientos y reduces el «ruido mental» acumulado. Esto te permite identificar tus verdaderas prioridades y analizar las situaciones con mayor objetividad.
• Reduce la impulsividad: Comenzar el día con un registro te ayuda a definir tus intenciones y propósitos. De esta manera, afrontas los desafíos laborales con una actitud más consciente y menos propensa a las reacciones emocionales.
• Aumenta tu confianza: Al reflexionar sobre tus emociones y miedos relacionados con una decisión, puedes anticipar obstáculos y desarrollar estrategias para afrontarlos. Esto te da mayor seguridad en tu capacidad para tomar la opción correcta.

• Decisiones más equilibradas: Escribir a mano activa ambos hemisferios del cerebro, lo que promueve el equilibrio entre la lógica y la creatividad. Evita que las emociones tomen el control por completo y te permite ver más allá de las opciones limitadas.
• Desglose de decisiones complejas: Nuestra memoria de trabajo solo puede almacenar de 3 a 4 elementos a la vez. Ante una decisión compleja, como aceptar un nuevo empleo en otra ciudad, necesitas considerar varios factores: satisfacción laboral, impacto económico, mudanza, etc.
• Mayor confianza: Investigaciones de la Universidad de Michigan demostraron que escribir sobre las decisiones antes de tomarlas aumenta la confianza y reduce los sesgos . Al plasmar tus pensamientos, identificas con mayor facilidad opciones engañosas y sopesas las alternativas de forma más objetiva.

Cómo empezar tu diario matutino:

No esperes a tener una decisión difícil para comenzar. Lo ideal es convertirlo en un hábito diario. Cuanto más escribas, más descubrirás lo que guardas en tu subconsciente.

Busca 20 minutos de tranquilidad para reflexionar sobre las decisiones que te esperan ese día y analiza las emociones o miedos que podrían influir en tu elección.

No te preocupes por la perfección. La idea es que las páginas en blanco se conviertan en tu espacio de reflexión. La sinceridad es clave: escribe con libertad, sin preocuparte por cómo te juzgarán.

Si te cuesta ser vulnerable, puedes usar notas adhesivas, servilletas o un archivo con contraseña. El valor está en el proceso, no en el producto final.

Aquí algunas preguntas para estimular tu pensamiento:

• ¿Cuál es la emoción principal que siento al tomar esta decisión?
• ¿Hay algo que me distraiga y pueda afectar mi capacidad para decidir?
• ¿He consultado a todas las partes interesadas?
• ¿Qué información me falta para tomar esta decisión?
• ¿Cuáles son las posibles amenazas a mi confianza en esta decisión?
• ¿Estoy tomando esta decisión siendo mi mejor yo?

Incluso en los días sin decisiones cruciales, continúa escribiendo. Puedes reflexionar sobre momentos difíciles de tu vida. Se ha comprobado que esta práctica contribuye a una mejor salud a largo plazo [fuente confiable]. Escribir te permite liberar el estrés y te sorprenderás al descubrir sentimientos que no sabías que tenías.

Tomarse unos minutos al día para escribir puede parecer un lujo en una agenda apretada. Sin embargo, la investigación demuestra el enorme impacto de este hábito, incluso si lo haces de forma esporádica.

Lo importante es entender por qué lo haces para tomar decisiones sabias, objetivas.

Incorporar el diario matutino a tu rutina puede ser un desafío al principio, pero con el tiempo se convierte en un hábito natural y gratificante. Recuerda:

• Consistencia: Dedica 20 minutos cada mañana, sin importar si tienes una decisión importante en puerta o no. La escritura regular te ayudará a desarrollar tu intuición y claridad mental.
• Sinceridad: Sé honesto contigo mismo al escribir. No filtres tus pensamientos ni te preocupes por la gramática o la ortografía. La clave es expresar tus emociones y preocupaciones sin reservas.
• Experimentación: No existe una única forma de escribir un diario matutino. Puedes probar diferentes formatos, como listas, preguntas, poemas o incluso dibujos. Lo importante es encontrar lo que mejor funcione para ti.
• Paciencia: No esperes resultados inmediatos. El diario matutino es un proceso que te ayudará a tomar mejores decisiones a largo plazo. Confía en el proceso y disfruta del viaje de autodescubrimiento.